El Programa de Maestría en Estudios Mesoamericanos se enfoca en la complejidad, diversidad y pluralidad étnica que han dado sentido a la región desde la época prehispánica hasta la actualidad. De ahí que sea el concepto de la larga duración el que articule los campos de conocimiento del programa, que si bien enuncian una perspectiva disciplinar, en la práctica se entrelazan para ofrecer a los alumnos una visión inter y multidisciplinaria de las culturas indígenas que se desarrollaron en tiempos pasados pero que siguen estando vigentes hoy día en esta vasta área cultural.
1) Antropología de los pueblos indígenas: En esta línea de investigación se inscriben las temáticas vinculadas con el campo de acción de la disciplina antropológica. Así, se analizan las contribuciones teóricas y metodológicas para el estudio del hombre inmerso en la diversidad cultural y se participa del debate sobre las diversas perspectivas actuales de la antropología que centra su atención en conceptos como cultura y naturaleza, la cuestión étnico-nacional, los derechos indígenas, la alteridad, los movimientos sociales y las resistencias, así como los sistemas cosmológicos y ontológicos, la mitología y los procesos rituales de las poblaciones originarias del área. De esta forma, se toman en cuenta los postulados de la antropología simbólica, que surgió con el giro semiológico- interpretativo, la antropología cognitiva o lo que se conoce como “giro ontológico en antropología.” El énfasis siempre está puesto en los análisis trans, multi e inter disciplinares.
La investigación en y con comunidades indígenas en buena medida se sustenta en el dato etnográfico obtenido a través del trabajo de campo, por lo que se contemplan los métodos de la etnología para construir etnografías regionales sustentadas sobre todo en las tradiciones orales de cada una de las comunidades.
2) Arqueología mesoamericana: El campo de estudio de la arqueología son las evidencias materiales de las culturas. A partir de ellas se analiza la dinámica y la evolución de poblaciones humanas antiguas y contemporáneas en un contexto determinado. Así, a partir de las investigaciones arqueológicas se abordan temáticas fundamentales para la comprensión de las culturas mesoamericanas como el poblamiento temprano del área y las características de las sociedades de cazadores recolectores; el origen de la agricultura y de las sociedades sedentarias; el surgimiento de los estados y de las sociedades urbanas. De igual forma, con los resultados que aportan la arqueología del ámbito doméstico, o la indagación de los patrones de asentamiento y el análisis espacial, así como los exámenes de los restos esqueléticos, sólo por mencionar algunos tópicos, es factible reconstruir, aunque sea en parte, aspectos de la vida cotidiana o ritual de poblaciones antiguas, que a su vez se vinculan con otras líneas tales como el urbanismo, la economía o la producción; elementos todos que remiten a la materialidad de sociedades complejas. Las investigaciones de este campo se pueden inscribir en subdisciplinas como la arqueología ambiental, la arqueología de superficie y del paisaje, la geoarqueología o la etnoarqueología.
3) Filología de las lenguas mesoamericanas: En este campo se analiza la relación lengua, cultura y pensamiento. Es decir, su fuente de estudio son los textos escritos u orales en los que se examinan la estructura y la evolución de las lenguas mesoamericanas antiguas y modernas, así como su desarrollo histórico y literario. Se abordan entonces la literatura o las tradiciones literarias del pueblo o grupo de pueblos que las han producido. La perspectiva de la larga duración en la que se inscriben las culturas mesoamericanas, permite que en este campo se aborden desde los primeros vestigios de escrituras, con la epigrafía como disciplina (en este sentido cabe señalar que un campo de estudio en particular es el de los sistemas escriturales), hasta aspectos sustanciales de la lingüística antropológica en los que se toman en cuenta la fonología, morfología y sintaxis, o la semántica, semiótica y análisis del discurso. De esta forma, las investigaciones se pueden acoger a los planteamientos teóricos de la lingüística descriptiva con el análisis y descripción gramatical, considerando cualquiera de los niveles morfo-sintáctico-discursivo, o de la lingüística histórica o reconstructiva, así como de los estudios de genealogía lingüística y dialectología.
4) Historia cultural: La trayectoria histórica de las comunidades indígenas de Mesoamérica desde los primeros poblamientos hasta la actualidad, así como las creaciones culturales, la religión, las ciencias, las artes, la economía o la organización sociopolítica, entre otras, son el objeto de este campo de conocimiento. Se destaca la importancia de los procesos históricos para abordar las complejidades que conforman los contextos étnicos, así como sus relaciones con el entorno y/o con otras culturas, o con las distintas realidades sociales que interactúan en esta área cultural. La aproximación a las fuentes documentales con las herramientas teóricas que brinda la disciplina historiográfica, permite el análisis del pasado desde la perspectiva del presente. Así, el marco de referencia en el que se encuadran investigaciones, es el largo proceso histórico que ha construido a Mesoamérica como un complejo y dinámico mosaico de una gran diversidad étnica, social y cultural, cuyos protagonistas han sido los pueblos indígenas, poseedores de una cosmovisión particular que se manifiesta sobre todo en los mecanismos de resistencia y en las estructuras comunitarias, que tienen sus raíces en el pasado, pero que siguen estando vigentes hoy día, y en buena medida siguen siendo su razón de ser.
